
Cuando, en mitad de una discusión, él acaba con su vida, decide utilizar su posición para que nadie se entere de lo ocurrido.
El policía cree tenerlo todo controlado, con todas las sospechas dirigidas a un inocente. Sin embargo las cosas se le complican en el momento en que llega un tipo raro vestido con una vieja gabardina: Erius, el investigador de la Inquisición, al cual no le temblará el pulso si tiene que ponerlo todo patas arriba.
Tensión y sentimiento en un relato dramático y fuertemente emotivo en el cual podemos asomarnos, haciendo unos esbozos, de las penurias que muchas mujeres sufren a diario en manos de sus maridos.[ME INTERESA]